Antioxidantes y antiinflamatorios podrían proteger frente a la sordera

El proyecto Evaluación de nuevas terapias para la prevención de la hipoacusia neurosensorial, en el que participan el HUPA, el CSIC, la UAM y el ISCIII, está demostrando la utilidad terapéutica de combinar sustancias antioxidantes y antiinflamatorias en modelos animales de hipoacusia inducida por fármacos ototóxicos y por exposición al ruido. Podría tener una aplicación clínica en un futuro cercano.

La ministra de Sanidad, Dolors Montserrat, entregó el 5 de julio el premio Fiapas al equipo liderado por la jefa de Servicio de Otorrinolaringología del HUPA, Teresa Rivera Rodríguez (a su izquierda) (Hospital Universitario Príncipe de Asturias)



Un trabajo experimental en el que participa el Servicio de Otorrinolaringología del Hospital Universitario Príncipe de Asturias (HUPA) de Alcalá de Henares está demostrando la utilidad terapéutica de combinar sustancias antioxidantes y antiinflamatorias en modelos animales de hipoacusia inducida por fármacos ototóxicos y por exposición al ruido.

La investigación realizada con ratas y ratones puede tener una aplicación clínica en un futuro cercano al haber puesto de relieve el efecto protector de dichas sustancias sobre la audición y el oído.

El proyecto Evaluación de nuevas terapias para la prevención de la hipoacusia neurosensorial está liderado por la jefa del Servicio de Otorrinolaringología del HUPA, Teresa Rivera Rodríguez y ha sido financiado por el Fondo de Investigación en Salud, del Instituto de Salud Carlos III, perteneciente al Ministerio de Economía, Industria y Competitividad.

Este trabajo se ha realizado por un equipo formado por dos grupos de investigación, uno clínico y otro básico. En el clínico, además de Rivera Rodríguez, también forman parte dos médicos del Servicio (Fernando García-Alcántara y Lorena Sanz). La investigadora Isabel Varela-Nieto, del CSIC, Universidad Autónoma y el Instituto de Salud Carlos III, lidera el grupo que completan Silvia Murillo-Cuesta y Lourdes Rodríguez de la Rosa.


El trabajo ha sido reconocido recientemente con el XV Premio FIAPAS -la ministra de Sanidad, Dolors Montserrat, hizo entrega del mismo el pasado 5 de julio- que concede la Confederación Española de Familias de Personas Sordas por su contribución a mejorar la calidad de vida de las personas sordas. Además, y relacionado con esta investigación premiada, se ha traducido en artículos de Otolaryngology Head and Neck Surgery, Current Drug Delivery y Frontiers in Aging Neuroscience y está pendiente de publicarse en Hearing Research.

La sordera es un importante problema de salud pública debido a su elevada prevalencia e impacto en la calidad de vida de la población. En todas las etapas de la vida hay factores ambientales que contribuyen a la pérdida auditiva, siendo los más destacados el ruido y las sustancias ototóxicas. En los niños la hipoacusia repercute en la adquisición del lenguaje y en los adultos dificulta la integración social y se asocia con la progresión del deterioro cognitivo.

En la actualidad no existe un tratamiento farmacológico reparador para ninguna de las formas de sordera, disponiéndose sólo de terapias de sustitución con dispositivos (audífonos e implantes auditivos). Resulta esencial la investigación de nuevas terapias preventivas, reparadoras y regeneradoras de la audición.

En España existe más de un millón de personas (1.064.000 personas, según el Instituto Nacional de Estadística) con una discapacidad auditiva de distinto tipo y grado. De ellas, más del 98 por ciento utiliza la lengua oral para comunicarse. Según el INE, 13.300 personas son las que emplean la lengua de signos.


El 8% de la población en España, con problemas auditivos

El 8 por ciento de la población en España (más de 3 millones y medio de personas) tiene problemas auditivos, de distinto tipo y grado, que les plantean dificultades para entender una conversación en un tono de voz normal, sin prótesis auditivas. Además, una de cada mil personas de la población general adquiere la sordera a lo largo de su vida.

La hipoacusia también afecta a cinco de cada mil recién nacidos, lo que supone en nuestro país que casi 2.500 nuevas familias cuentan con un hijo sordo cada año. De hecho, más del 97 por ciento de los niños sordos nacen en familias con padres y madres oyentes.

Artículo original: http://otorrinolaringologia.diariomedico.com, publicado: Lun/25/sept/2017