El efecto ir de fiesta suele ser una experiencia frustrante para las personas con discapacidad auditiva. Para ellos, las palabras de las personas que conversan parecen ahogarse con las demás conversaciones, la música y el ruido de la calle.
Carecen de lo que se denomina capacidad “cocktail party” que tienen las personas con audición normal, o capacidad de concentrar la atención en una conversación diferenciando los sonidos relevantes del ruido de fondo.
El lado izquierdo del cerebro clasifica los sonidos
Los investigadores estudiaron lo que ocurre en el cerebro cuando discriminamos entre los sonidos que queremos escuchar y otros sonidos. El estudio estaba dirigido por Hideko Okamoto de la Universidad de Münster, Alemania. Él y su equipo monitorizaron la actividad cerebral de los participantes mientras escuchaban sonidos y ruido de fondo en uno o ambos oídos.
Las imágenes grabadas de la actividad cerebral indicaban una mayor actividad en el hemisferio izquierdo del cerebro a la hora de discriminar los sonidos del ruido. En otras palabras, el efecto “cocktail party” o discriminación de los sonidos relevantes tiene lugar en el lado izquierdo del cerebro.
A fecha de hoy, los investigadores no han podido determinar la razón por la cual las personas con discapacidad auditiva tienen una capacidad reducida para discriminar los sonidos del ruido. Es un tema para futuras investigaciones.
El conocimiento sobre el funcionamiento del cerebro beneficiará sin duda a las personas con discapacidad auditiva en cuanto al desarrollo de nuevos métodos de tratamiento y aparatos de asistencia a la escucha.
Fuente: hear-it.org