En mujeres con un índice de masa corporal de 30 a 34, el riesgo relativo de padecer pérdida de audición es un 17% mayor, y si este índice es de 40 o superior, el riesgo es un 25% mayor en comparación con aquellas mujeres cuyo índice de masa corporal es menor a 25, según indica un estudio.
Asimismo, los investigadores descubrieron también que en mujeres con una circunferencia de cintura de 80 a 88 cm, el riesgo relativo de padecer pérdida de audición era un 11% mayor, y si su contorno de cintura era superior a 88 cm, el riesgo era un 27% mayor en comparación con mujeres cuya circunferencia de cintura era inferior a 71cm.
Solemos considerar la pérdida de audición como parte inevitable del proceso de envejecimiento, pero estos hallazgos aportan pruebas de que factores de riesgo potencialmente modificables, como mantener un peso saludable y un estado físico activo, puede ayudar a prevenir la pérdida de audición o retrasar su progresión”, explica Sharon Curhan, doctora, profesora, autora principal del artículo e investigadora de la división Channing de medicina del hospital Brigham y de mujeres en Estados Unidos.La actividad física reduce el riesgo
Uno de los aspectos más interesantes del estudio es el hecho de que aumentar la actividad física parece minimizar el riesgo de padecer pérdida de audición. Las mujeres que realizaban ejercicio físico tenían un 17% menos riesgo de padecer pérdida de audición en comparación con las que no hacían ningún tipo de ejercicio.
Caminar, que era una de las formas de actividad física más mencionadas entre las mujeres, se asociaba a una disminución del riesgo de pérdida auditiva, andar dos horas a la semana o más minimizaba el riesgo en un 15%, en comparación con caminar durante menos de una hora a la semana.
La pérdida de audición sigue siendo un proceso natural de envejecer, pero el estudio demuestra que una dieta sana y el ejercicio físico pueden reducir el riesgo de la pérdida auditiva.
Estudio de cerca de 70.000 mujeres
Los investigadores se basaron en los datos de 68.421 mujeres recopilados en el estudio “Nurses”™ Health Study II” (“Estudio II sobre la salud de las enfermeras”), durante el periodo de 1989 a 2009. Los investigadores analizaron la información del índice de masa corporal, circunferencia de cintura, actividad física y autoinforme de pérdida auditiva.
Los puntos de referencia e información actualizada se obtuvieron mediante cuestionarios bienales validados. Los resultados fueron publicados en la revista The American Journal of Medicine.
Fuentes: scienceworldreport.com, news-medical.net