Publicado: 06 de junio/2016
Una investigación canadiense sobre el "tinnitus" indica un nivel alarmante de daños auditivos tempranos y permanentes en gente joven que ha estado expuesta a altos niveles de música.
"Es un problema creciente y creo que va a ir a peor. Es un reto de salud pública", afirma Larry Roberts, investigador canadiense y uno de los autores de este estudio publicado en Scientific Reports.
Un 28 por ciento de los participantes habían desarrollado ya un tinnitus persistenteLos investigadores entrevistaron y realizaron test auditivos a un grupo de 170 estudiantes de entre 11 y 17 años, y los resultados fueron que casi todos tenían hábitos que ponían en riesgo su salud auditiva (dada su asistencia a fiestas, clubs y empleo de aparatos de música) y una cuarta parte había experimentado ya un persistente y crónico tinnitus, un zumbido que afecta sobre todo a personas mayores de 50 años.
Estudios posteriores, todos en alumnos de la misma escuela de Sao Paulo (Brasil), muestran que quienes padecían tinnitus aparentemente oían igual que sus compañeros, pero tenían una tolerancia significativamente menor a ruidos de alta intensidad, lo cual es considerada una señal oculta de daño permanente en los nervios responsables de producir sonido.
Roberts explicó que cuando los nervios auditivos están dañados, las células cerebrales incrementan su sensibilidad a las señales que entran, lo cual convierte los sonidos de intensidad normal en sonidos de intensidad más alta. Esta percepción es indicativa de daño nervioso no detectable con un audiograma.
Estos niveles de exposición al sonido son bastante comunes en nuestro entorno, sobre todo en gente joven, y son suficientes para producir daños cocleares ocultos", indica Roberts, y añade:"El mensaje es: protege tus oídos".Roberts trabajó junto al investigador brasileño Tanit Ganz Sanchez, que lideró el estudio, y sus colegas de Medicina de la Universidad de Sao Paulo (Brasil). Después de escuchar altos niveles de música, es común tener un zumbido en los oídos hasta el día siguiente, asegura Roberts.
Más de la mitad de los estudiantes que participaron en el estudio reconocieron haberlo sufrido. "Este breve tinnitus es una temprana señal de advertencia", señala Roberts.
Aproximadamente un 28 por ciento de los participantes habían desarrollado ya un tinnitus persistente. Este mismo porcentaje también mostró alta sensibilidad a sonidos de alta intensidad, indicando que las neuronas que transmiten sonidos al cerebro estaban dañadas.
Mientras otras formas de pérdida auditiva pueden ser reparadas, no ocurre lo mismo con este daño nervioso. la única solución es la prevención. En este sentido, Roberts señala que la campaña de prevención es similar a la relacionada con el tabaco, ya que la población no es consciente de que se está dañado a sí misma.
Fuente: www.diariomedico.com, imagen de www.fotolia.com