Estudio muestra la forma en que la pérdida de audición neurosensorial súbita afecta la calidad de vida

Una pérdida de audición neurosensorial súbita que no se recupera en un periodo corto de tiempo tiene un impacto negativo a largo plazo en la calidad de vida y la calidad de la audición, según muestra un estudio finlandés.

El estudio examinó dos grupos de pacientes que experimentaron una pérdida de audición neurosensorial súbita e inexplicable. En el primer grupo, los pacientes recuperaron su audición en un periodo corto de tiempo. En el segundo grupo no se recuperó la audición. Los pacientes fueron examinados unos 8 años de media tras experimentar la pérdida de audición por primera vez.


La calidad de vida era significativamente mejor en el grupo que había recuperado la audición. Además, la audición general (como era de esperar) y la vitalidad eran significativamente mejores en el primer grupo. Los pacientes que no se habían recuperado tenían también más tinnitus y problemas de equilibrio que los que habían recuperado su audición tras la pérdida de audición súbita.

Tinnitus y vértigo

El 85% de todos los pacientes experimentaron tinnitus. El 23% de los pacientes que se habían recuperado de la pérdida de audición neurosensorial experimentaron vértigo, mientras que el 54% de los que no se habían recuperado convivían con vértigo.

El estudio

El estudio se realizó en el Hospital de la Universidad de Tampere en Finlandia entre 172 pacientes que habían experimentado pérdida de audición súbita inexplicable. 100 pacientes se habían recuperado, frente a 72 que no lo habían hecho.

La pérdida de audición neurosensorial súbita se definió en el estudio como la reducción de 30 dB o más en al menos tres frecuencias contiguas producida en el marco de 72 horas en el oído afectado, y audición normal en el otro oído.


El estudio “Quality of life and hearing Eight Years After Sudden Sensorineural Hearing Loss” (“Calidad de vida y de audición 8 años después de la pérdida de audición neurosensorial súbita”) se publicó en la revista The Laryngoscope en el número 127, en abril de 2017.

Fuentes: https://www.hear-it.org, The Laryngoscope, 23 de noviembre/2017