Esta articulación es responsable de permitir que todos los movimientos de la mandíbula y su funcionamiento este relacionado con varios sistemas del cuerpo tales como la masticación, el phonoarticulatory (habla), respiratorio, sistema postural y el vestíbulo (que afecta el equilibrio y la audición ).
Cuando una enfermedad afecta a esta articulación, tal sistema puede colapsar, produciendo una serie de signos y síntomas.
Los signos y síntomas de que esta articulación entro en estado de disfunción son:
➫Dolor de cabeza crónico
➫Dolor en la cara Dolor o dificultad para masticar
➫Dolor de cuello y el hombro
➫Limitación de la apertura bucal
➫Luxación y subluxación mandibular
➫problemas oclusales (cambio en la forma de los dientes)
➫Bruxismo
➫Cambios de postura Mareos
➫Otalgia (dolor de oído)
➫Zumbido de oído, acúfeno o tinnitus
Sin embargo, este es un término genérico para las consecuencias (disfunción) de diferentes enfermedades que afectan a la ATM y se agrupan bajo el término articulación temporomandibular enfermedad, los griegos ARTHROS, que significa articular y pathos, enfermedad.
Es más fácil de entender cuando se utilizan algunos ejemplos
Un paciente puede tener un trastorno de la ATM debido a una artropatía de origen:
Infecciosa: significa que la persona ha desarrollado un conjunto de mal funcionamiento debido a una infección que causa daños a los componentes de la ATM.
Traumática: un mal funcionamiento debido a lesiones en las articulaciones de la estructura ATM causadas por un traumatismo directo (golpes en la mandíbula) o indirectos (movimientos bruscos de la mandíbula, como en accidentes de tráfico).
Autoinmune: significa que las lesiones ATM son causados por autoimunológica enfermedad como, por ejemplo, la artritis reumatoide.
Dental: significa que las lesiones estructurales de la ATM ha dentoesquelética origen tal como, por ejemplo, una interferencia con la trayectoria óptima de cierre de mordaza causada por una restauración.
Neoplásica: significa que hay un tumor (auto contenida para ser malignos o benignos) que afectan al funcionamiento articulado.
Así que para tratar un trastorno de la ATM, primero tenemos que pensar en la patología (griego pathos enfermedades y logos, estudio), es decir, el estudio de la enfermedad responsable de la disfunción.
No tiene sentido tratar una artropatía infecciosa solo con la placa, una neoplásica con el ejercicio, o una fuga dental con infiltraciones porque simplemente no va a funcionar, para cada tipo hay una forma apropiada de tratar.
Fuente: patologiadaatm.com