El uso de tecnología de celulares, ipad y juegos, está dañando a niños y jóvenes cuando entran a la etapa laboral de sus vidas al resultar con daños auditivos y un pobre lenguaje para expresarse. Si bien las nuevas generaciones nacieron con la capacidad de comunicación de la tecnología, el costo es niños retraídos, pésima ortografía y expresión así como daños en sus oídos, incluso la vista, debido a la exposición constante a las pantallas, reconoció el especialista Víctor de la Garza.
Destacó que la primera causa de daño a los oídos es el uso de audífonos para escuchar música a un alto volúmen, porque le suben más y es comparado como tronar un cohete o explosivos. El especialista informó que las empresas aplican pruebas de audiometría y muchos jóvenes no pasan porque tienen dañado el oído por la contaminación a causa de ruido y uso de audífonos, esto es, oyen unas frecuencias, pero las agudas no, que son las que se dañan fácilmente.
Afirmó que le llegan muchos pacientes niños y jóvenes con trauma acústico, que es una lesión producida por ruido muy intenso. Una exposición al ruido que rebase los 80 decibeles es causa del daño al oído interno y, lo peor es, agregó, que es lesión irreversible, porque se presenta al nivel de las células ciliadas del oído interno.
Explicó que ha visto en sus consultas rupturas traumáticas de la membrana del oído, laceración del canal auditivo e infecciones crónicas. Ni con un aparato auxiliar auditivo lo mejora, destacó, por ello, la recomendación es un uso moderado de la tecnología.
También es dañino escuchar música en los autos a un alto volumen, como quienes portan en sus coches bocinas llamados bajos y hasta vibran con el ruido. Otras causas es también el uso indebido de cotonetes, plumas, dedo, ganchos o lo que sea para limpiarse los oídos, lo cual es incorrecto, porque comienza a acumularse el sebo o cerilla. El oído sólo debe limpiarse con el baño normal que le cae agua.
El especialista manifestó que la tecnología es buena para consultar, pero ha provocado niños y jóvenes que ya no saben leer, tienen pésima ortografía y un lenguaje pobre, porque están llenos de información basura.
Es útil para consultar, pero se pasan horas y dejan estimular al cerebro con la lectura, lo van dañando a la larga, porque se hacen menos reactivos a estímulos externos, por ejemplo, un niño con tablet no contesta, son retraídos, su relación con las personas es distinta, porque no tiene actividades físicas, también produce la obesidad”, subrayó el especialista.En tanto que Antonio Álvarez, presidente de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación, reconoció que alrededor de un 30 por ciento de los jóvenes que solicitan empleo no pasan los exámenes auditivos y son rechazados.
Dijo que hay personas entre los 20 y 30 años ya con problemas de audición, por lo que las empresas no se arriesgan a contratarlos, porque no van a escuchar el ruido de la maquinaria pesada como montacargas.
“Encontramos que muchos de los trabajadores que son sometidos a pruebas de oído ya traen daño y eso es irreversible, vemos a muchachos de 20 a 30 años ya con ese problema, hace un año y medio se hizo un estudio, y se hablaba de un 30 por ciento de muchachos que no pasaban los exámenes y seguimos igual”, expresó.
Comentó que en las empresas también consideran que el uso de celular en el trabajo es distractor, por lo que algunas lo han prohibido a sus trabajadores en las áreas laborales, pero la mayoría son flexibles para que lo usen con la recomendación de que limiten el uso.
La primera causa de daño a los oídos es el uso de audífonos para escuchar música a un alto volumen porque le suben más y es comparado como tronar un cohete o explosivos.
Fuente: periodicolavoz.com.mx