La pericondritis es una infección de la piel y del tejido que se encuentra en el cartílago de la oreja y puede desencadenarse con una inocente picadura.
Se trata de una lesión o infección en el oído externo, concretamente en la piel que recubre el cartílago de la oreja. La pericondritis puede producirse por diversas causas, entre las más comunes destacan los traumatismos en un lado de la cabeza, deportes en los que existe el contacto físico, perforación del cartílago (piercings), quemaduras, acupuntra o picaduras de insectos.
Síntomas
Los síntomas que se producen a causa de la pericondritis pueden llegar a ser muy molestos. Algunos de los más comunes son la fiebre, aparición de pus, inflamación, dolor y enrojecimiento. Si la infección se extiende hacia el cartílago, puede ocurrir que muera parte del pabellón auditivo. Si esto pasa, hay que extraer dicha parte quirúrgicamente y posteriormente habría que reconstruir la parte dañada con cirugía estética.
Tratamiento
Para su tratamiento el especialista puede o bien recetar antibióticos por vía oral, si la infección es leve, o bien por vía intravenosa e incluso el ingreso hospitalario, en los casos más graves.
Si el tratamiento se aplica de manera temprana, lo más lógico es que la evolución de esta patología sea rápida. Sin embargo, si la infección avanza y termina afectando al cartílago (condritis), puede ocasionar la deformación de éste y acabar necesitando cirugía plástica para devolverle su aspecto normal.
Una de las medidas más eficaces para prevenir la pericondritis y la condritis es evitar cualquier perforación en el cartílago de la oreja (sí en el lóbulo). La moda extendida de los piercings y pendientes en el cartílago han provocado múltiples casos de infecciones que han derivado en pericondritis o condritis.
Fuentes: Audifon, centros auditivos