Se trata de un trastorno auditivo caracterizado por la hipersensibilidad y aversión a ciertos sonidos que producen reacciones como molestia, fastidio e irritabilidad, miedo e incluso violencia.
Los síntomas suelen aparecer al final de la infancia, de acuerdo con la Escala de Activación de la Misofonía.
Los sonidos que provocan este malestar tienen una intensidad relativamente baja, pero con el tiempo se acumulan hasta constituirse con un síndrome. Impacta en la vida social porque las personas ya no pueden involucrarse en actividades sociales" , asegura Olivia Ávila, otorrinolaringóloga.Actualmente existen diversas opciones para su tratamiento, como la terapia psicológica (cognitivo-conductual), a través de medicación, y/o terapia de sonido. No dudes en acudir con un especialista para que sea él quien determine lo mejor para tratar este problema..
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