Se han hallado evidencias de que existe una contribución genética en el caso de los zumbidos en ambos oídos. Unos 70 millones de personas en Europa y 9 millones en España sufren acúfenos, es decir, una percepción constante de ruidos en los oídos.
Se trata de una condición que afecta al 12,7% de la población adulta del mundo y para el 1% resulta ser incapacitante. La patología se presenta mayoritariamente en hombres (66%) y mayores de 40 años (78%), aunque también se han dado casos en niños y jóvenes (6,5%).
Las personas afectadas, además, pueden llegar a sufrir trastornos psicológicos como pudieran ser ansiedad, depresión o insomnio que acaben repercutiendo en su concentración o en su entorno laboral y personal.
El acúfenos, también conocido como tinnitus, es una alteración del sistema nervioso que puede darse en un solo lado o en ambos. Existen dos tipos: objetivos, que son sonidos reales que nacen en el mismo oído; y subjetivos, son los más habituales, productos de una excitación nerviosa de cualquier parte del oído.
Su origen todavía es desconocido –se creía que eran trastornos de la circulación sanguínea en el oído interno-, pero sí existen factores de riesgo como el estrés, el consumo de sustancias tóxicas o las actividades con cambios bruscos de presión que pueden favorecer su aparición.
Sin embargo las últimas noticias han dado un giro a todo lo conocido hasta el momento al señalar que su origen podría ser hereditario. Investigadores han hallado evidencias de que existe una contribución genética en el subtipo específico de acúfenos bilaterales en unos términos similares a los que existen en enfermedades como el alzheimer o el parkinson.
El estudio ha sido elaborado por José Antonio Lopez-Escámez, otorrinolaringólogo del Hospital de Granada y por Christopher Cederroth, del Instituto Karolinska, con la ayuda de varios grupos de investigación del consorcio europeo Tinnet. Fruto de este trabajo la unidad clínica de Otorrinolaringología de los hospitales de Granada pondrá en marcha una consulta entre los pacientes con esta patología.
Una condición que puede afectar a las personas independientemente de su clase social. Así lo comenta por ejemplo, el director de cine español Pedro Almodóvar, que reconoce “apartarse del mundo” cuando sufre un brote: “Es una pesadilla. Se dispara de volumen y no puedes hacer nada al respecto. A mí, además, me provoca distorsiones”.
También sufre de acúfenos el actor estadounidense William Shatner, conocido por interpretar al Capitán Kirk en la serie de televisión Star Trek, una dolencia que en el pasado le llevó a apartarse de su vida social e incluso a divorciarse de su mujer.
A pesar de todo, los avances científicos han permitido que está dolencia sea cada vez más llevadera. “Una persona que sufre acúfenos puede tener una buena calidad de vida con un buen tratamiento”, afirman los expertos.
Aunque también es cierto que los daños en el oído y la pérdida de audición han aumentado en los últimos años, debido principalmente al uso de auriculares y otros sistemas de entretenimiento, se están experimentando nuevas técnicas que se unen a las ya en uso como la tecnología de Andulación, que puede aplicarse tanto para aliviar el dolor como para mejorar el rendimiento y bienestar.
La Escuela de Ingeniería y Ciencias del grupo de Robótica del Tecnológico de Monterrey (México) ha comprobado que el tinnitus podría generarse por cambios en la vía auditiva de la cóclea, situada en el oído interno. Este hecho, el que se trate de un fenómeno plástico, permitiría atenuar sus efectos e incluso revertirlo.
Los primeros resultados han resultado ser todo un éxito, pero la terapia se encuentra todavía en una etapa preliminar y habrá que esperar a ver cómo reaccionan sujetos con otros tipos de acúfenos.
Con información de ZIGZAG digital: http://zigzagdigital.com, Publicado: Juev/02/nov./2017