Se considera contaminación acústica al exceso de sonido o ruidos que alteran las condiciones normales del ambiente. Bajar el volumen del equipo de sonido y evitar gritar, son algunas de las medidas para evitar la contaminación acústica, uno de los problemas más importantes en la Ciudad de México, y con cada vez más presencia en la sociedad.
“Evitemos la contaminación acústica”, indicó la Secretaría de Protección Civil capitalina en su cuenta en Twitter @SPCCDMX, como parte de su programa de prevención. Para evitar daños a la salud de los habitantes de esta ciudad y alteraciones de las condiciones normales del ambiente, la dependencia recomendó usar equipos de sonido con bajo volumen y evitar gritar.
Además usar tapones de oído o auriculares si se trabaja en un área donde hay ruidos fuertes, para evitar pérdida de audición y pedir que bajen la música en los lugares públicos cuando sea elevada.
Se considera contaminación acústica al exceso de sonido o ruidos que alteran las condiciones normales del ambiente y son generados por actividades humanas como el uso de automóviles o por actividades industriales, que producen efectos negativos en la salud.
De acuerdo con la dependencia capitalina, los efectos de esta contaminación son alteración de la presión arterial, tensión muscular, dolor de cabeza, silbido en los oídos, estrés, irritabilidad, trastornos del sueño y falta de atención.
La Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal es la responsable de medir los niveles de ruido con la operación de 70 dispositivos denominados "Decibelímetros", para vigilar que no se rebasen los límites máximos permisibles de emisiones sonoras que, de acuerdo con la Norma Ambiental del Distrito Federal, son de 65 decibeles durante el día y 62 en la noche.
Quienes infrinjan lo estipulado en la Ley de Cultura Cívica en materia de contaminación por ruido serán remitidos ante el Juez Cívico y las multas van de 10 a 40 salarios mínimos o arresto de hasta 24 horas.
Fuente: www.elsiglodetorreon.com.mx